Contratada para resolver un caso a primera vista sencillo, la detective
Bruna Husky se enfrenta a una trama de corrupción internacional que
amenaza con desestabilizar el frágil equilibrio entre una Tierra
convulsa y la dictadura religiosa de Reino de Labari. En un futuro en el
que la guerra está supuestamente erradicada, Bruna lucha contrarreloj
por la libertad y en defensa de la vida, mientras asimila los
sentimientos contradictorios que le produce hacerse cargo de una niña
pequeña.
Bruna Husky es una heroína extrema y fascinante; una superviviente capaz
de todo que se debate entre la fragilidad y la dureza, entre la
autosuficiencia y la desesperada necesidad de cariño. Es una fiera
atrapada en la cárcel de su corta vida, un tigre que va y viene ante los
barrotes de su jaula «para que no se le escape el único y brevísimo
instante de la salvación», como el felino de la bella frase de Elias
Canetti.
NOTA: En ningún momento, cuando compré el libro, vi en la reseña que la ciencia ficción estuviese presente en la novela... Y es que a mí si algo no me gusta ni en la lectura ni en el cine es todo lo que se salga de la realidad. Así que contra la opinión de mucha gente que me rodea, no he visto ( ni pienso hacerlo) las películas de Star War, ni he visto ni he leido ( ni pienso) a Harry Potter ni nada parecido. Y mira por dónde, sin comerlo ni beberlo, se me cuela este libro futurista ( se desarrolla entre 2020 y 2130 o así); y no soy capaz de ponerle una mala nota porque la escritura está suelta y entretiene pero a mí tanto los términos como los nombres de los personajes y las Asociaciones...me superan. Y repito, NO PUEDO CON ELLOS. Le doy, de todos modos, un ....7.
No hay comentarios:
Publicar un comentario