«La luz declinante de la ventana y su efecto óptico en el cristal daban 
una tenue pátina rojiza al enorme lienzo; como si éste, antes de ser 
realidad, ya empezase a ensangrentarse lentamente. Y de pronto, todo 
adquirió sentido.
-Se llamará Guernica -dijo Picasso.»
Mayo de 1937. La Guerra Civil sigue su sangriento curso en 
España, pero también lejos de los campos de batalla se combate entre las
 sombras. Una doble misión lleva a Lorenzo Falcó hasta París con el 
objetivo de intentar, de cualquier forma posible, que el Guernica que 
está pintando Pablo Picasso no llegue nunca a la Exposición Universal 
donde la República pretende conseguir apoyo internacional. Aunque ya se 
adivinan en Europa los vientos de la nueva guerra que asolará el 
continente, la música alegre sigue sonando, y el arte, los negocios, la 
vida frívola ocupan todavía a intelectuales, refugiados y activistas. 
Acostumbrado al peligro y a las situaciones límite, Falcó debe 
enfrentarse esta vez a un mundo en el que la lucha de ideas pretende 
imponerse sobre la acción. Un mundo que a él le es ajeno, y al que 
aplicará sus propios métodos. 
NOTA:Bien pensé yo , cuando leí hace dos años la primera de Falcó, que Pérez-Reverte había dado una vez más con la aguja de marear y que, como ocurrió con Alatriste, había Falcó para rato. Pero si nos tenemos que fiar de lo último que se ha escrito en la prensa, con este libro Sabotaje da por ventilado al personaje. Verdaderamente me ha extrañado pero será que se ha cansado de sus canalladas... Y yendo al libro que nos ocupa a mi gusto, sin decir que se pierde el interés en su lectura porque eso con este señor es difícil, sí que se hace algo premioso. A mí, sin duda ninguna, el que me gustó-gustó fué Eva; y siguiendo en orden Falcó. Así que ya veis el lugar que le queda a este. De todos modos, como digo, no aburre así que le doy un ....7.
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